LOS HOMBRES DUROS NO BAILAN
"Los hombres duros no bailan", la guardaba como una máxima inquebrantable, inflexible, incorruptible...
Aunque algunas vocecitas le decían "ya habrá quien te haga cambiar de opinión"; ¡ni madres! y de ahi no lo podías mover.
Y asi iba el predicando su máxima por la vida, hasta que un dia apareció ella, y lo cautivó con sus movimimentos y lo hizo romper su estado basal y cuando se dió cuenta ya estaba bailando con ella, compartiendo su goce.
Al dia siguiente se percató que ella no era un mortal común sino una diosa y se rindió totalmente ante sus encantos al verla ejecutar una danza del fuego.
Aunque todo esto no lo hizo alterar su discurso, no cambio de opinión a pesar de las vocecitas, el siguió predicando que los hombres duros no bailan.
Despues de todo el podía ser cualquier cosa, menos un hombre duro.
Aunque algunas vocecitas le decían "ya habrá quien te haga cambiar de opinión"; ¡ni madres! y de ahi no lo podías mover.
Y asi iba el predicando su máxima por la vida, hasta que un dia apareció ella, y lo cautivó con sus movimimentos y lo hizo romper su estado basal y cuando se dió cuenta ya estaba bailando con ella, compartiendo su goce.
Al dia siguiente se percató que ella no era un mortal común sino una diosa y se rindió totalmente ante sus encantos al verla ejecutar una danza del fuego.
Aunque todo esto no lo hizo alterar su discurso, no cambio de opinión a pesar de las vocecitas, el siguió predicando que los hombres duros no bailan.
Despues de todo el podía ser cualquier cosa, menos un hombre duro.